Las láminas de caderas (poliestireno de alto impacto) son materiales termoplásticos conocidos por su excelente resistencia al impacto, fabricación fácil y rentabilidad. Se usan ampliamente en las aplicaciones de embalaje, impresión, pantalla y termoformado.
No, el plástico de las caderas se considera un material de bajo costo en comparación con otros plásticos de ingeniería. Proporciona un buen equilibrio de asequibilidad y rendimiento, por lo que es ideal para aplicaciones sensibles al presupuesto.
Si bien las caderas son versátiles, tiene algunas limitaciones:
Resistencia UV más baja (puede degradarse bajo la luz solar)
No es adecuado para aplicaciones de alta temperatura
Resistencia química limitada en comparación con otros plásticos
HIPS es una forma modificada de poliestireno. El poliestireno estándar es frágil, pero las caderas incluyen aditivos de goma para mejorar la resistencia al impacto. Entonces, mientras están relacionados, las caderas son más duras y duraderas que el poliestireno normal.
Depende de la aplicación:
HDPE ofrece una mejor resistencia química y UV, y es más flexible.
HIPS es más fácil de imprimir y tiene una mejor estabilidad dimensional para aplicaciones como empaque o señalización.
En condiciones de almacenamiento adecuadas (lugar fresco y seco lejos de la luz solar directa), las hojas de caderas pueden durar varios años. Sin embargo, la exposición prolongada a la luz UV o la humedad puede afectar sus propiedades mecánicas.
Si bien las caderas se usan en aplicaciones industriales, las caderas no son adecuadas para implantes médicos como los reemplazos de rodilla. Se prefieren materiales como aleaciones de titanio y polietileno de peso ultra alo-molecular (UHMWPE) para su biocompatibilidad y rendimiento a largo plazo.
Las caderas pueden degradarse con el tiempo debido a:
Exposición a los rayos UV (causa fragilidad y decoloración)
Calor y humedad
Malas condiciones de almacenamiento
Para extender la vida útil, almacene las hojas de caderas en un entorno controlado.